Crían con
facilidad si se les otorgan unas condiciones mínimas de habitabilidad y de
alimentación. Aunque hay gente que ha criado a estas aves en jaulas con unas
medidas inferiores a las de 1 m. de largo y 50 cm. de ancho y alto, lo ideal
para tener a una pareja sería la de otorgar unas medidas de largo y ancho de al
menos 1 m² por pájaro, por lo que estaría muy bien una pajarera de 2 m. de
largo x 1 de ancho (aquí podría dejarse en 80 cm) por pareja. La altura puede
variar, pero 1,5 ó 2 m. sería muy aceptable. Es esencial que el pájaro pueda
ir de un extremo a otro de la pajarera volando y que no tenga que ir de un palo
a otro con un simple salto, además de ser conveniente que al volar no dé con
sus alas en los laterales. El ejercicio en las aves es esencial para mantener
una buena musculatura que le será imprescindible sobre todo en su época de
cría.
La Ninfa es ideal
para aquellos criadores que quieran aprender, desarrollar y mejorar el linaje de
sus aves, pues a parte de la larga lista de mutaciones que hay actualmente,
podría pasarse el resto de su vida mejorándolas e incluso, por qué no,
agregando alguna nueva. Pero a pesar de todas estas intenciones, nunca hay que
olvidar que la Ninfa común es esencial para el mantenimiento en nuestro aviario
de ejemplares robustos y de buen tamaño, juntando cada ciertas generaciones a
las crías con ejemplares comunes, que darán de nuevo vigor y fuerza a nuestros
pájaros, y así mantener en la medida de lo posible las características del
ejemplar salvaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario